¡Esta es una revisión vieja del documento!
Conjunto de sistemas y estructuras implantados en una organización para almacenar el conocimiento generado en la misma y poder posteriormente utilizarlo con la máxima eficacia y eficiencia.
Para concretar una buena Gestión del Conocimiento se debe: o Valorar el desarrollo de la persona en el trabajo. o Entender que existe un patrimonio común. Esto exige valorar las capacidades y competencias para “delegar” el poder por parte de los directivos y de “asumir responsabilidades “por parte de los distintos agentes organizacionales. o Reconocer la formación de las personas y la amplitud de su campo de conocimientos transformándolas en activos para la organización o Capacitar de personal o Posibilitar nuevos accesos al conocimiento dentro de la organización. o Que cualquier persona, en cualquier lugar y momento pueda tener acceso al conocimiento que existe y se genera en la organización. o Facilitar una infraestructura mínima de reservorios y administradores de la información, utilizando fundamentalmente las nuevas tecnologías: intranet, portales de información, campus de formación, digitalización de la información, etc. o Poner en práctica procedimientos y dispositivos que permitan recoger, procesar, compartir, difundir, discutir y utilizar todos aquellos datos, informaciones y conocimiento que son necesarios para llevar adelante la mejora continua de la organización. Una buena y eficaz Gestión del Conocimiento debe permitir: o Incrementar y optimizar la profesionalización de las personas y sus roles laborales. o Crear y mantener la memoria organizacional, así como validar experiencias exitosas de tal manera que en el futuro sea posible volver a emplearlos en cualquier proceso interno. o Permitir proyectar con claridad la mirada común de la organización: estandarizando procedimientos y calidad del servicio. o La búsqueda de nuevos procedimientos en la gestión laboral.